22 diciembre 2006

Pinochet el lado oscuro de Dios

Sevilla, 22 de diciembre de 2006



Dios debe tener un lado oscuro cuando permite que el mal exista y se manifieste desde el principio de los tiempos. Es más, lo utiliza de manera soberbia para justificarse a sí mismo, una prueba de ello la tenemos en Job. Job era un hombre cabal, recto y temeroso de Dios, pero este para asegurarse de su lealtad lo puso a prueba haciendo una apuesta con Satanás, al cual le dio plenos poderes para que sometiera a Job a todo tipo de penalidades y así poder confirmar su lealtad. De esta manera Dios permite que el mal tome carta de naturaleza y prevalezca sobre el bien.

Algo así debió de ocurrir cuando, el 11 de septiembre de 1973, el General Augusto Pinochet perpetró el golpe de estado que pondría fin al mandato del Presidente Salvador Allende. Durante 17 años Chile viviría una dictadura que le costaría al país más de 3000 muertos, muchos de ellos desaparecidos aún en la actualidad. Si tenemos en cuenta que Satanás era un ángel muy bello que fue expulsado del Paraíso por intentar colocarse a la altura de Dios, no encuentro el calificativo para ese engendro de cobardía, crimen y traición que respondía al nombre de Pinochet.

La manera en que este militar traidor organizó la represión contra la ciudadanía de su país, instaurando la muerte y la tortura, es sencillamente espeluznante. Integró a médicos y psicólogos para que estas fueran más efectivas, utilizando todo tipo de tecnología para provocar el mayor sufrimiento posible dejando las mínimas huellas. A estas alturas no tengo más remedio que sentir que Satanás y el pecado que cometió para ser expulsado del Paraíso comparado con la actuación Pinochet sería algo así como el colegial que desoyendo a sus padres come un caramelo antes del almuerzo.

Tres eran los fines que esperaba alcanzar el dictador el día que vino al mundo, abrió los ojos y blasfemó contra las personas de bien que en el mundo habitan: arrancar información torturando, destruir la dignidad de la persona y aterrorizar a todos los opositores a su régimen. Cosa que no consiguió, pues tras largos años de lucha la ciudadanía chilena volvió a recuperar la Democracia que el cátedro de Satanás les arrebató, traicionando a quien le nombró Comandante en Jefe del Ejército dieciocho días antes, Salvador Allende.

En los últimos años, tras sus 500 días en Londres, hemos podido contemplar a un Pinochet que hasta a la muerte le daba repugnancia acogerlo, por lo que pensamos que por fin lo veríamos ante los Tribunales de Justicia rindiendo cuentas por sus crímenes. Por desgracia esto no ha sido así. En un último acto de cobardía el dictador decidió morirse para negarnos la satisfacción de ver como un genocida se enfrentaba a los horrores que había cometido con total impunidad durante años, dejándonos con un regusto amargo.
Afirmaba Machado que “sería el peor de los malos, el bribón que olvidaba su condición de Diablo”. Esta frase toma forma en imágenes, cuando pudimos ver a Margaret Thatcher dando ánimos a Pinochet en Londres y en los esfuerzos que dedicaron Blair y Aznar para que el genocida no fuera extraditado a España. Todo esto se completa con las declaraciones del Sr. Fraga Iribarne, fundador del PP, que tras la muerte de Augusto Pinochet decía que el Gobierno de Salvador Allende era un caos y que Pinochet se marchó dejando un país mejor que el que había encontrado. El torturador está muerto, pero estos bribones están vivos y no estaría de más pedirles responsabilidades a Blair y Aznar por obstrucción a la Justicia y a Don Manuel Fraga Iribarne por apología del terrorismo. A la sociedad chilena el golpe de estado le lleva unos 1000 muertos más de los que en nuestro país ha asesinado ETA, estos datos hablan por sí mismo de la catadura moral de estos tipos.

Pero lo verdaderamente grave de estas declaraciones es que nadie del PP ha pedido la dimisión de Fraga como Senador y su expulsión del partido. Ni la Fiscalía del Estado ha abierto ningún procedimiento para determinar si sus palabras cometen el delito de apología del terrorismo. Esto nos viene a demostrar que, aún estando en un Estado de Derecho, a los demócratas de nuestro país nos sigue amenazando el lado oscuro.

17 diciembre 2006

A Dios y al Diablo

Sevilla, 17 de diciembre de 2006


El fallo del Tribunal Supremo por el cual se desestima la denuncia presentada contra el Presidente del Gobierno y los socialistas vascos pone de manifiesto las serias dificultades que tiene el PP y su cúpula directiva para entender el funcionamiento de la democracia como vehículo de convivencia entre todos y todas, donde todas las opiniones son expresables y todas las posiciones son legitimas, siempre que estas se hagan dentro del Estado de Derecho y de nuestra Constitución.

Parece que a la derecha española le faltara algún tipo de gen que les impide entender las reglas del juego democrático, que son iguales para toda la ciudadanía del país y mucho más le cuesta entender que los que gobiernen puedan tener cualquier ideología distinta a la suya. Aunque por otro lado quizás esta carencia de la comprensión democrática que el PP tiene no se deba a un gen patógeno y sea el resultado de no contar, en su pasado, con un modelo de derecha democrática capaz de defender sus ideas sólo en las urnas, sin ayuda del sable del coronel, sería como el conocimiento empírico que defendía el filósofo Hume: “No se puede repetir ni conocer de aquello de lo que se carece de experiencia”.

En este marco el Sr. Elorriaga sería uno de esos personajes sacado del Renacimiento, que lo mismo utilizaba el veneno con una mano y la daga con la otra defendiendo lo mismo el blanco que el negro, siendo capaces de rendir pleitesía al bien y al mal simultáneamente, lo que ya es sabido por todos y todas, o sea, ponerle una vela a Dios y otra al Diablo.

No parece muy lógico que, en el caso de que hubiese sido verdad que ETA no asistió a un encuentro en el mes de agosto con el Gobierno, esto no entrara en contradicción profunda con las palabras que día a día le hemos escuchado al Sr. Elorriaga, que según él, el Presidente Zapatero había claudicado ante todas las pretensiones de los terroristas, ya que en buena lógica, sería correcto pensar que si alguien está dispuesto a darles todo lo que piden porque se está claudicando no quisieran asistir a esa reunión y a todas, teniendo en cuenta la doctrina del Sr. Elorriaga: a ETA se le va a dar todo.

Sin embargo nos encontramos en la actualidad que piden que se rompa cualquier comunicación con el mundo abertzale, porque ETA no está dispuesta abandonar el asesinato y la extorsión. ¿En qué quedamos Sr. Elorriaga, claudicación o cese de contactos porque ETA no consigue lo que quiere? Aclárese y nos lo aclara a los demás antes de que su paranoia se convierta en crónica y que pueda afectar por pequeña que sea a nuestra salud democrática.

Otro “actor” que en estos días hemos de sufrir tras el fallo del Supremo, que lejos de razonar o argumentar, nos adentra directamente a la moral del mismo, si de moral se trata Sr. Cañete, quizás la suya no salga bien parada, si entendiéramos la evasión de impuestos como un atentado contra los más desfavorecidos, acto que usted no dudó cometer en su día, como prueba la documentación que se halla en diferentes Delegaciones de Hacienda. Y ya que de moral hablamos según su punto de vista y opinión una de las frases más inmorales se la oí al Sr. Aznar cuando era Presidente del Gobierno el día que exclamó que a los muertos del Yak 42 había que dejarlos en paz, acallando a los familiares que se manifestaban para obtener los cuerpos de sus seres queridos. Todos y todas recordamos cual fue la actuación del Sr. Trillo, en tan dolorosos hechos.

Señores del PP el fallo del Tribunal Supremo viene a decirles a ustedes de manera contundente, que la denuncia interpuesta contra los Socialistas, de progresar socavaría los cimientos de nuestra democracia, ya que el Poder Judicial condicionaría al Poder Legislativo, ni más ni menos, quizás ya va siendo hora de que comprendan que las leyes y la moral son iguales para todas y todos y no un privilegio de unos pocos, como ustedes quieren pretender con patrañas y engaños.

08 diciembre 2006

Por un puñado de dólares

Sevilla 8 de diciembre de 2006


La jurisprudencia norteamericana y la española son muy diferentes, casos que allí llevan a los tribunales no tendrían cabida en nuestro ordenamiento jurídico, de hecho el fallo de sus tribunales en ocasiones puede sorprendernos e invitarnos a la reflexión.

Hace unos meses una abogada afroamericana consiguió una indemnización, mediante fallo judicial al demostrar que una multinacional debía en parte su inmensa fortuna al tráfico de esclavos.

Esto me hizo meditar sobre la siguiente cuestión: si se demostrara como un monumental error la intervención militar contra Irak, promulgada por Aznar, que ha costado miles de vidas de civiles y que ha llevado a un país a la ruina y miseria más absoluta, así como a la desestabilización de toda aquella zona alimentando al integrismo de la peor calaña. Podríamos hacer lo mismo que la abogada afroamericana y pedir daños y perjuicios a la empresa creada y explotada por el Expresidente Aznar.

Hasta qué punto se puede considerar evaluable, en dinero, la decisión que tomó en su momento de mandar tropas a aquel país. Qué porcentaje económico cabría pedir por sus conferencias ante los sectores de la derecha más extrema norteamericana defendiendo la guerra, ante la necesidad de estar frente a armas de destrucción masiva que nunca existieron, o las conexiones imaginarias de la dictadura de Sadam con el terrorismo internacional.

Los derechos de la explotación de la imagen de Aznar o los de su esposa, Doña Ana Botella, se basan en el hecho incuestionable de la función pública que desempeñó en determinados momentos como Presidente de Gobierno. Pues no cabe en mi cabeza que personajes anónimos de nuestra vida cotidiana pudieran lucrarse de su imagen, si esta no fuera pública y notoria, por eso dudo mucho que la empresa formada por una policía y un profesor de autoescuela pudiera obtener ningún tipo de beneficios.

Claro está que esta empresa proyectada y creada por el Expresidente Aznar pudo ver la luz gracias a la doble moral que el Expresidente, sus Exministros y dirigentes del PP profesan, ya que de otra manera alguien con principios éticos, mínimamente asentados, hubieran desechado tal aventura empresarial.

El Exministro Álvarez Casco tras su retirada del Ministerio de Fomento pedía respeto a su privacidad, precisamente él que se caracterizó por no tener ninguno en toda su carrera política. El Expresidente Aznar pide que le dejen en paz. Por qué no nos dejó él en paz y nos metió en una guerra ilegal y sucia y por qué lleva meses utilizando en sus argumentaciones la violencia verbal para desautorizar y erosionar al Gobierno socialista. Su frase en la que afirmaba que España se estaba vulcanizando habla por si sola. Doña Esperanza Aguirre que cuenta que tiene dificultades para llegar a fin de mes, etc.

Dado que el recién publicado Informe Baker demuestra, más allá de la duda razonable, la inutilidad de la masacre en Irak, no estaría de más pedirles a los señores abogados de aquellas ciudades donde Aznar da sus conferencias, que emprendieran acciones legales contra su empresa.

03 diciembre 2006

En mi nombre Sí

Sevilla, 3 de diciembre de 2006



La Libertad de Expresión y la Democracia son dos cosas que van íntimamente ligadas, de forma que no puede haber Libertad de Expresión sin Democracia, ni Democracia sin Libertad de Expresión, estos dos elementos en sí forman la base de cualquier Estado de Derecho y por consiguiente son garantía de convivencia de la ciudadanía. Cualquier persona puede expresar libremente sus ideas, sin ninguna cortapisa ni censura, si en el ejercicio de este derecho alguien se extralimitara, sería el Poder Judicial, herramienta de la Democracia, desde su independencia el encargado de evaluar y sancionar, si procediera, el mal uso de la libertad de opinión.

“Hasta aquí todo claro” ¿pero que ocurre cuando conociendo los límites de la Libertad de Expresión, que el Estado de Derecho ofrece, no la expresas con la claridad y la rotundidad que tu ética y tu razón quieren que lo hagas? Podemos decir que se produce una abolición de parte de tus Libertades Civiles y Democráticas, a este hecho lo podríamos llamar autocensura.

Este proceso aparece cuando una misma, por miedo a dañar a terceras personas en su dolor, reprime su raciocinio de exponer libremente lo que piensa, y una misma limita y restringe, en parte, su personalidad así como sus derechos de ciudadana.

Esto se da cuando se vive en un país como el nuestro que padece la calamidad del terrorismo, que tanto dolor nos ha producido al arrebatar cientos de vidas de todas las edades y estamentos sociales, un país con tanto sufrimiento y miserias a lo largo de su historia.

Así, un buen día, te encuentras que tú, que fuiste capaz de luchar por tus ideas y de manifestarlas a sabiendas de que te la jugabas, ya que en la dictadura cualquier discrepancia pública contra el régimen estaba castigada con pena de cárcel, decides callarte y no exteriorizar tus ideas.

Este día llegó para mí cuando se le rindió homenaje póstumo a Miguel Ángel Blanco. Tras su secuestro y asesinato, uno de los más repugnantes crímenes de ETA en su larga trayectoria de delincuencia sanguinaria, cuando el ejecutivo no cedió al chantaje de la banda terrorista, sentí que me arrancaba el sosiego con este execrable hecho. Después de ese momento entraron en coalición mi raciocinio y mi libertad de pensamiento en mi recuerdo a una persona que había entregado su vida por las libertades.

Los del Río cantaban su famosa “Ay Macarena” ante la presencia de los padres de Blanco qué asistían a aquel evento con la vista perdida, propio de aquellas personas que la vida le asigna la peor de las desgracias, la muerte de un hijo.

Los abucheos que tan sonoramente le dedicaron las nuevas generaciones del PP a cantantes y actores, por ser personas de izquierdas, que movidos por el dolor que en aquellos días nos atenazaban a todos y a todas, se ofrecieron para participar en dicho acto, me provocaron un sentimiento de incredulidad y de rechazo ante aquel grosero espectáculo, que a mi parecer, más que un homenaje póstumo, resultó ser tal falta de respeto hacia la víctima y su familia que opte por callar.

Y este silencio lo he seguido manteniendo con respecto a declaraciones y hechos que he tenido que ver en los últimos años con el terrorismo y sus víctimas. Creo que dado los acontecimientos que se están dando al hilo de esto debo retomar mi libertad de expresión y no sentir que me traiciono a mí misma como persona y como ciudadana.

Con todos mis respetos a las personas víctimas de ETA, no es lícito utilizar el dolor con una inmensa puesta en escena que el PP dirige y orquesta en contra del gobierno, con fines políticos cada vez que promueve una marcha para acabar contra el proceso de paz. Hasta que punto es tolerable y aceptable, que damnificados por el terrorismo de ETA, que sufrieron en su carnes amputaciones y que todos y todas hemos visto caminar, lo cual supuso motivos de alegría y satisfacción para todas las personas de bien, ahora aparezcan en carritos de ruedas abriendo las manifestaciones y que se presten a ello, en vez de seguir dando ejemplo de superación y dignidad a todos y a todas.

Manifiesto mi intención de intentar no volver a autocensurarme, he llegado a la conclusión de que este es un factor con el que aquellos que carecen de escrúpulos cuentan para llevar a cabo sus propósitos. Asimismo, me gustaría mencionar aquella otra parte de las víctimas de ETA, que sufren en silencio sus pérdidas e intentan superar el dolor, día a día, y que están dispuestas a la aceptación, que no al perdón, para que los demás no pasen por lo que ellos y ellas están pasando

Por todo lo expuesto quiero manifestar: En mi nombre Sí.