26 abril 2006

Memoria histórica de Andalucía

26 de abril de 2006


Afirmaba San Agustín que equivocarse era humano, pero que reiterarse en el error era diabólico. Esto debe sucederle al PP de Andalucía con el señor Arenas a la cabeza: su política ha olido intensamente a azufre desde siempre.

Tras meses de afirmar primero que el Estatuto que se estaba tramitando era insuficiente y, en segundo lugar, pedir que no se siguiera con él hasta no conocer el catalán, ahora se descuelga con que no puede apoyarlo porque “sobrepasa las competencias que tenía pensadas para Andalucía”. Les resulta insalvable, entre otras cosas, la definición de “realidad nacional”.

Que el Estatuto andaluz se apruebe sin su apoyo y el de su partido, es algo tan lógico como natural, dada la trayectoria que los dirigentes de la derecha, de todo el Estado en general y de Andalucía en particular, que han mostrado su inquina hacia nuestra Comunidad Autónoma.

Si en la actualidad Andalucía tiene la autonomía según el artículo 151 en lugar del 143, es porque el pueblo andaluz torcimos la decisión de la derecha, cuando nos tiramos a la calle y luchamos por unos derechos que considerábamos nos pertenecían y a los que no estábamos dispuestos a renunciar. Hubo que conseguir la retirada en el congreso del artículo 143. Entonces nos sometieron a los andaluces y andaluzas a un referéndum un tanto especial. Las condiciones eran las que siguen: que en el resultado de la votación no sólo se reflejara mayoría general, sino que, además, la votación se individualizara hasta tal punto que, si en una sola provincia de las ocho no se conseguía la mayoría, ésta invalidara a todas las demás. Para agnósticos, creyentes y ateos se produjo el milagro: conseguimos ganar el referéndum y acceder según el artículo 151 y convertirnos en autonomía histórica. Todo esto en contra de la voluntad y los deseos de su partido, señor Arenas.

Así que comprenderá que el intento de boicot que ustedes pretenden de nuevo infligir a la esperanza de progreso y futuro para todos/as no me sorprende. Recuerde al eslogan que esgrimían hace unos 20 años: “Andaluz, no votes, este no es tu referéndum”. Estoy impaciente por saber del pozo de sabiduría, que es usted, el nuevo eslogan con el que intentará sabotear el referéndum que nos llevará a dar nuevos pasos hacia el progreso y el bienestar de todos/as.

Escuché hace unos días a un tertuliano calificar de disparate aplicar el término de “nacionalidad” para Andalucía, porque no disponíamos de un idioma propio. Es cierto, pero digo yo que disponiendo ya de un catalán, un gallego y un euskera de los que disfrutar, tampoco es una cuestión insalvable.

Quizás, lo que este docto tertuliano desconocía es que (hablo desde mis escasos conocimientos), que ni en España ni en toda Europa se creó, como aquí, una policía específica para una comarca determinada, como fue el caso de la Guardia Civil, generada específicamente para reprimir los movimientos campesinos andaluces. Tuvieron tanto éxito que más tarde se extendió al resto del Estado. Esto sí es un disparate histórico. Podría seguir aportando datos, pero no lo creo necesario.

Así que, señor Arenas, espero de todo corazón que su actitud diabólica se convierta para usted en un auténtico infierno en las próximas elecciones autonómicas; que los resultados den la razón a San Agustín.

PD.: Siempre le queda el consuelo de interponer una querella al consejero de la presidencia, el señor Zarrías, para que el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía la desestime como en tantas ocasiones. Todo “un pleno”.